Rapé
Rapé
El rapé, un polvo hecho a partir de plantas milenarias cuyo componente esencial es el tabaco, es una medicina física y espiritual que ayuda a limpiar la glándula pineal, una parte del cuerpo que conecta al ser humano directamente con la energía.
Esta glándula, a través de algunas sustancias de uso diario como el flúor, se va calcificando y adormeciendo, por lo que el rapé logra descalcificar esa glándula, además de otorgar otros beneficios para la salud tanto física como espiritual del ser humano.
La mezcla está compuesta por hierbas y minerales que las diferentes tribus han utilizado durante miles de años.
Su componente principal es el tabaco que suele aplicarse tostado a las brasas o hecho ceniza, pero más allá de qué plantas o minerales lo acompañen, lo importante es “el espíritu de esas plantas”, que proporciona un aporte extra a los distintos principios activos que componen esta medicina.
Aplicación
Durante la aplicación, a través de la nariz, se establece un vínculo entre el que proyecta (el terapeuta) y el que recibe (el paciente). Este vínculo resulta esencial para la sanación.
“La medicina no es únicamente el rapé, sino la intención de la persona que hace la proyección del rapé. Es un canal de la energía del espíritu, entonces debe de estar neutra para dar esa medicina y tener una intención sanadora para la otra persona”.
Propiedades del rapé
El rapé también puede consumirse en soledad. a través de un pequeño aparato “en forma de v (uve)” que dirige una punta a la fosa nasal y otra a la boca, uno puede utilizarlo en casa.
También sirve para aliviar alergias o dolores de cabeza, así como para tener claridad mental cuando se requiere una alta concentración para realizar una actividad.
“A nivel energético, entras en un estado meditativo inducido directo. A nivel físico, viene muy bien para enfermedades en las vías respiratorias o dolores de cabeza fuertes como las migrañas”.